¡Hey! Seguro has tenido esos días en los que sientes que todo está pasando muy rápido y no sabes si vas o vienes. ¡No estás solx! Todos hemos estado ahí, en ese lugar abrumador que parece que te traga entera. Pero adivina qué, ¡puedes superarlo!
Respira Profundo, en Serio: Cuando el estrés empieza a rondar, date un momentito. Cierra los ojos, inhala profundamente por la nariz, exhala suavecito por la boca. ¡Suena re simple, verdad? ¡Y lo es! Respirar profundo es como darle un abrazo a tu mente agitada.
Hagamos Brainstorming: A veces, la cabeza parece un boliche lleno de pensamientos saltando por todos lados. ¡Agarra papel y lápiz! Escribe todo lo que te anda dando vueltas. A veces, plasmarlo en papel hace que las cosas parezcan menos enormes.
Divide y Conquistarás: Esa lista interminable de cosas por hacer puede ser mega estresante. Pero, ¿sabes qué? Puedes dividirla en partes chiquitas. Agarra una tarea, desmenúzala en pasos mini y ¡tachán! De repente se ve menos monstruosa.
Esto te va a reconfortar:
¡Mímate un Poquito!: Sí, sabemos que en esos momentos el autocuidado parece misión imposible, ¡pero no lo es! Date 10 minutos para hacer algo que te encante, ya sea ver videos, leer algo chido o simplemente escuchar música relajante.
No Estás Solita: Acuérdate de que no eres la única en esta. Hablar con amigos, familia o incluso buscar consejo de alguien que admires puede aliviar un montón. ¡No tienes que ser la superheroína que carga con todo!
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